Durante la última década se le ha prestado gran importancia al incremento de la permeabilidad de la barrera hematoencefálica (BHE) en la fisiopatología de la esclerosis múltiple (EM), como punto de partida para el desarrollo del proceso inflamatorio-desmielinizante. La distinción entre las formas secundaria progresiva y exacerbante progresiva es difícil desde el punto de vista clínico, por lo que se decidió revisar retrospectivamente la historia de un paciente con EM al cual se le realizó un estudio seriado de la permeabilidad de la BHE (1988-1992) conjuntamente con la evolución clínica. La permeabilidad de la BHE se estableció calculando la relación albúmina LCR/albúmina suero. Se pudo constatar que la BHE estuvo alterada en todas las evaluaciones, incluso durante la remisión clínica después de una exacerbación. Se consideró inicialmente que este paciente había pasado de una forma inicial de exacerbación-remisión a una forma progresiva secundaria, pero los resultados del estudio de la BHE, teniendo en cuenta además el reporte de Weinshenker, nos inclinan a considerar una forma exacerbante progresiva en este caso. Sugerimos que los estudios de LCR deben ser tenidos en cuenta para determinar las formas clínicas de EM, así como los estudios de RMN previamente sugeridos.